Para ello, se tendrán en cuenta los distintos tipos de vehículos (cooperativos, conectados, autónomos y eléctricos), y se buscarán nuevas metodologías y soluciones para disminuir los riesgos de ciberseguridad asociados a cada uno de ellos.
Aunque actualmente existen protocolos que garantizan la seguridad, la conectividad de los vehículos, los sistemas de conducción autónoma o la carga inteligente de vehículos eléctricos introducen nuevas brechas de ciberseguridad que deben abordarse.
En el marco de CARAMEL se desarrollarán productos IDS (Intrusion Detection System) / IPS (Intrusion Prevention System) así como tecnologías y servicios avanzados para gestionar ciberataques complejos y reducir posibles daños. Se diseñarán también nuevas infraestructuras TIC interoperables y escalables, que proporcionen seguridad cibernética sostenible y privacidad digital.
La ciberseguridad es uno de los cuatro riesgos globales más graves a los que nos enfrentamos, según estableció el Foro Económico Mundial en Davos a principios de 2018. Para 2020, los expertos esperan que se alcancen los 20.000 millones de dispositivos conectados, lo que sin duda propiciará un número mayor de ataques cibernéticos.
Las pruebas piloto de CARAMEL se llevarán a cabo en Karlsruhe, y estan previstas en enero del 2022.
El proyecto CARAMEL ha recibido una financiación de 5 millones de euros del Programa Horizonte 2020 de la Unión Europea y su ejecución durará 30 meses (octubre 2019 – marzo 2022). El proyecto está coordinado por i2CAT, y cuenta con la participación de 14 socios más de 8 países europeos (Alemania, España, Chipre, Portugal, Países Bajos, Reino Unido, Grecia y Austria).