El estudio se ha centrado, en primer término, en algunas comunidades residenciales del ámbito central y sur del Raval, con perspectivas de continuidad en el resto de ámbitos vulnerables del distrito de Ciutat Vella.
La metodología seguida toma como punto de partida la escala de la vivienda y la comunidad para profundizar en las herramientas de detección y diagnosis y exportar algunos resultados a escala urbana. Un extenso trabajo de campo con visitas a los espacios comunes de unas 70 comunidades residenciales ha permitido recopilar información detallada a nivel de vivienda y comunidad. En todo el proceso se han tenido en cuenta la perspectiva, necesidades y satisfacción de las personas residentes respecto al espacio que habitan (observando los usos, la apropiación y el cuidado de los espacios por parte de las personas, así como recogiendo sus observaciones gracias a entrevistas y conversaciones no estructuradas.
El proyecto ha contado con la colaboración además de diferentes entidades locales y de la administración, a fin de promover la transferencia de tecnología y la generación de redes de intercambio de conocimiento. Los resultados obtenidos permitirán orientar las políticas públicas de lucha contra la desigualdad territorial en Ciutat Vella, con el reto de mejorar las condiciones de vida de los colectivos más vulnerables, en riesgo de exclusión residencial.
El proyecto ha contado con financiación del Centro de Cooperación para el Desarrollo de la UPC entre 2019 y 2021.