Con este nuevo dispositivo se facilitará el consumo local de la generación renovable y se evitará el transporte de energía generada en grandes centros de producción alejados del consumo, contribuyendo a la mejora de la eficiencia del sistema.
A partir de algoritmos de inteligencia artificial con los que ha sido desarrollado, este dispositivo tendrá capacidad para predecir la demanda y la generación de energía en los puntos críticos de la red a corto plazo. De esta manera se podrá reducir la incertidumbre en el funcionamiento de la red y aumentar la eficiencia. Asimismo, se propondrán tecnologías de software y hardware para mejorar la monitorización de la red de baja tensión, y para la detección y aislamiento automático de fallas.
El proyecto se enmarca dentro del concepto de Red eléctrica Inteligente, o SmartGrids, y pretende transformar las redes eléctricas actuales en redes mucho más eficientes y seguras como medida necesaria e imprescindible para afrontar la transición energética hacia un modelo energético sostenible basado en la generación renovable
El proyecto pertenece al programa Horizon2020, tiene una duración de 36 meses y en el consorcio participan también la Universitat de Girona (coordinadores), Estabanell Energía, Joanneum Research (Austria), la empresa griega Intracom, Comsensus (Eslovenia) y Smart Innovation Norway. El presupuesto total es de 3.8M €.