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Un equipo de investigadores del área de materiales y estructuras del CATMech de la UPC participa en un proyecto de economía circular para estudiar la viabilidad de utilizar la cañamiza, un subproducto del cáñamo, en cinco aplicaciones en el ámbito de la edificación.
El proyecto de economía circular VALSUCANEM, en el que ha participado el Centro Avanzado de Tecnologías Mecánicas (CATMech) de la Universitat Politècnica de Catalunya - BarcelonaTech (UPC), ha permitido investigar la valorización de la cañamiza con el objetivo de obtener un material avanzado que se pueda aplicar al sector de la construcción.
La cañamiza es la fibra corta del cáñamo y se considera un material de desecho. En el marco de VALSUCANEM se ha estudiado la viabilidad de utilizar este subproducto en cinco aplicaciones diferentes del ámbito de la edificación: aislante térmico y acústico, tablero aglomerado, casetón y parquet.
Los retos tecnológicos del proyecto han sido:
- La creación de un nuevo material verde: lograr una resina verde o material aglutinante, que pueda conformar un material compuesto compatible con la cañamiza y pueda ser reciclado, de manera que la producción y el ciclo de vida no generen subproductos no aprovechables.
- Conseguir propiedades de durabilidad, resistencia, estabilidad y trabajabilidad que permitan alcanzar soluciones para el sector de la construcción, como pavimento interior o exterior, revestimientos, mobiliario urbano, etc.
- Desarrollar una prueba de concepto.
El resultado más prometedor ha sido el material aislante térmico y acústico fabricado con 70% de cañamiza y 30% de fibra de cartón reciclada, obteniendo un comportamiento de aislamiento similar al de otros materiales comerciales ya existentes. Con los datos obtenidos, se pretende añadir un recubrimiento vegetal tipo goma arábiga o colofonia para proteger el material del ambiente, y añadir ácido cítrico para mejorar la durabilidad y la resistencia a la humedad. Este nuevo material fue sometido a un proceso de durabilidad (de 12 meses) durante el cual no se observó degradación de sus propiedades. El análisis del ciclo de vida del material obtenido indica que con una fabricación industrial eficiente se podría lograr un material con emisiones negativas de CO₂.
Dentro del sector de la energía y los recursos, el proyecto ha conseguido incrementar el valor del cultivo de cáñamo reduciendo sus residuos (hasta un 15%) y alargando la vida útil de la cañamiza dándole un uso con un alto valor añadido. Asimismo, se ofrece una solución para el uso extensivo de la madera y otros materiales sintéticos utilizados actualmente. En el caso de la madera, aunque se trata de un producto natural, su crecimiento es muy lento (años) en comparación con los 4 meses que tarda en crecer el cáñamo, además de que supone un gasto importante de recursos en transporte y tala de árboles. Asimismo, el cultivo de cáñamo requiere muy pocos recursos y permite fijar el CO₂ de la atmósfera.
El proyecto VALSUCANEM se ha llevado a cabo en colaboración con la empresa Lloveras Planteles SL. La consecución de los objetivos planteados permitirá consolidar la empresa en el sector agroalimentario e iniciarse en la investigación y desarrollo de tecnologías facilitadoras, además de ampliar sus líneas de negocio en la comercialización de soluciones para los residuos del cáñamo (no solo la venta de plantones).
Presupuesto y financiación
El proyecto tiene una duración de 3 años (noviembre de 2020 - noviembre de 2023) y ha contado con un presupuesto de 98.179,24 € gracias a una ayuda de ACCIÓ, la Agencia para la Competitividad de la Empresa.
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