El LCMA utilizará técnicas de modelización numérica para poder determinar el potencial impacto de las principales actividades emisoras a la atmósfera sobre las áreas habitadas del municipio de Vacarisses, así como para determinar el origen de los potenciales episodios de malos olores, pudiendo registrar las frecuencias y evolución de este impacto. También se controlarán de manera continúa los episodios de malos olores a través de una red de sensores instalada en cinco puntos del municipio. Asímismo, se realizarán tomas de muestras puntuales de estos episodios cuando se detecten aumentos de concentración de COVs en los sensores instalados, con posterior control químico por la determinación cualitativa y cuantitativa de compuestos orgánicos volátiles (COV) en inmisión (concentración de cada contaminante en el aire que respiramos).
Estos compuestos no acostumbran a estar controlados en el origen de las emisiones y constituirán una excelente base de datos para evaluar el potencial impacto de las actividades emisoras en la atmósfera, no solo en cuanto a compuestos con componente de olor, sino también para evaluar si son tóxicos, nocivos, irritantes, carcinógenos, etcétera.
El LCMA cuenta con equipos y metodologías diseñados específicamente para la captación y análisis de los potenciales compuestos generadores de episodios de olores, de forma que permiten la captación dinámica con diferentes características asociadas a asegurar la calidad de la captación (equipos de monitorización en continuo de concentración relativa de contaminantes mediante sensores electrónicos, activación de presa de muestras según parámetros ajustables, adecuación del muestreo a las condiciones de contaminación local, etc).
El proyecto tendrá una duración de 3 años (2021 – 2024) con un presupuesto de 65.642,50 euros.